Sssserpientessss

Seguro que se preguntarán qué hacen estas viboritas tejidas en mi blog. (Bueno, al menos espero que les de curiosidad y no que piensen que mejor se saltan esta  entrada, jeje).

No sé si sepan, pero desde pequeña me encanta tejer, aunque me siento más a gusto haciéndolo con agujas en vez de ganchillo.

Recuerdo cómo en la secundaria hacía sufrir a mi profesor de geografía: me sentaba yo en la fila de hasta atrás y, mientras él trataba de explicar a los alumnos las etapas del un río desde su nacimiento hasta su delta, o la razón por la cual Moscú en verano es extremadamente caliente mientras que en invierno sufren de temperaturas bajísimas, yo mantenía las manos ocupadas tejiendo alguna prenda que se vendería en diciembre en el famoso bazar de Navidad de las Damas Suizas de México. Y no es que no me interesara la materia, lo que pasa es que mi madrina era profesora de geografía; a través de ella y los libros que nos regalaba, todo ese material era territorio conocido para mí.

En Hong Kong he tenido la oportunidad de practicar más el ganchillo por ayudar a una asociación no gubernamental que trabaja con gente de la calle. Creo que hace algún tiempo ya había escrito sobre ImpactHK, cuando tejimos  colchonetas con bolsas de plástico recicladas.

(Buscando en el archivo del blog me dí cuenta que hace ya dos años de esto. ¿A dónde va el tiempo?)


En fin, la asociación cuenta ahora con un centro de día donde las personas en situación de calle pueden pasar a descansar un rato; a abastecerse de comida, ropa o artículos de higiene;  tomar clases de inglés, o hasta participar en sesiones de apoyo psicológico si así lo desean.

Para recaudar fondos para este centro, el grupo de voluntarias ahora teje diferentes artículos como cobijas, juguetes, bolsas, para venderse en diferentes bazares a lo largo y ancho de Hong Kong.
La siguiente fotografía es el puesto que se montó hace algunos meses en Discovery Bay, donde cuatro veces al año hay un bazar destinado únicamente a productos hechos a mano.

Antes de seguir escribiendo, les dejo el enlace de la organización a la que apoyamos:  

ImpactHK 

Lo que me gusta mucho del grupo es que hay varias señoras que son expertas, no sólo tejiendo en ganchillo, sino también en enseñarnos a las menos hábiles cómo hacer las cosas. Gracias a ellas he pasado de los sencillos "Granny squares", que usa las puntadas más básicas del ganchillo, a ser capaz de elaborar patrones complejos como muestran estas fotos.

Para elaborar las cobijas, cada una de nosotras recibe un paquete con estambres e instructivo, y tejemos alrededor de nueve a diez cuadros. Luego los devolvemos, y otra voluntarias se encarga de unir todos los cuadros en una cobija.

La cobija de la foto de abajo la llamaron "English Rose" y es la que más rápido se ha vendido. No me sorprende en lo más mínimo; ¿y a ustedes?

Esta cobija se llama "Ocean Flowers":