Le génie des lieux.

Durante los meses de mayo y junio en Hong Kong se presentó una exposición especial dedicada a Claude Monet en el marco del festival "Le French May". 

La verdad me tardé bastante en ir a ver la muestra "Claude Monet: the Spirit of Place (Le génie des Lieux)" porque estaba en el Hong Kong Heritage Museum que se encuentra hasta Sha Tin. Con todo y que es un pintor que me fascina, me la pensé para lanzarme hasta allá. Desde la casa se tarda uno como dos horas en llegar, incluyendo varios trasbordos si va uno en metro, pero aproveché un domingo saliendo de la iglesia para ir. 

Ulises estaba fuera y los chicos ese día estaban invitados con unos muy buenos amigos suyos, Sam y Caleb, igual de locos por los juegos de mesa que mis chicos. Los cuatro pasaron la tarde jugando "Dungeons and Dragons". Lo malo es que el mayor se fue ya a los Esatdos Unidos a estudiar la uni y el más chico se fue a vivir a Pekín con sus papás en el verano. Parte de las cosas que hay que aprender cuando se vive tan lejos de casa es que los amigos vienen y van, están un rato y luego se mudan, y se tiene que mantener las relaciones a distancia a través de medio electrónicos.
 

El museo desde el puente sobre el canal.

Bueno, con la tarde libre, agarré mi camión de dos pisos desde la parada de Admiralty, me acomodé en la parte superior junto a la ventana y disfruté del trayecto hasta la parada que me tocaba. De ahí caminé unos diez minutos, cruzando el canal, hasta llegar al museo.  

La verdad tenía ya algo de hambre, pero cerca del museo solamente hay una zona industrial y otra residencial, sin restaurantes a la vista, y el único lugar que servía comida en el museo estaba para reventar, con una cola larguísima tanto para comer sentado como para pedir la comida para llevar. Así que decidí aguantarme el hambre, ver la muestra y ya luego buscar un lugar dónde comer algo.

Como era domingo ya quedaban pocos días, había muchísima gente en el museo y había que hacer un poco de fila para poder ver los cuadros. Mucha gente se paraba enfrente de una de las pinturas y se quedaba ahí un buen rato pero más que admirando la obra era para encontrar el mejor ángulo para tomarle foto. Yo también fui culpable, jeje, pero sólo tomé tres de los cuadros para poder agregar las imágenes al blog; después guardé mi cámara y me dediqué a disfrutar.